Necesito Volar
13/10/14
Siempre que iniciamos un viaje, comienza una nueva aventura. En estos momentos me encuentro en un vuelo Madrid rumbo a Amsterdam y no he dejado de mirar por la ventanilla desde que despegué. Todo ello me lleva a reflexionar que no puedo vivir sin subir a un avión.
Cada vez que se inicia el año y las campanas ya son parte del pasado, en mi interior aflora la aventura y el espíritu viajero donde siempre me pregunto: ¿cuántos viajes haré este año? ¿A cuántos aviones subiré? Y la pregunta que más me gusta ¿cuántos y qué rincones descubriré en los próximos once meses? Casi todas son preguntas sin respuesta, ya que es cuestión del azar facilitarme unos u otros destinos dentro de mis preferencias. Y así es. A modo de ejemplo 2014 me sonrió con un viaje a Japón sin estar preparado, un destino que no era cercano para mí y que gracias a una compañía aérea en la feria del turismo de Madrid, hizo que a día de hoy sea un enamorado o "friki" del destino y al cuál espero pronto volver.
Realmente miro por las nubes y me siento tranquilo, cómodo y sin agobios. Pienso que las ataduras que tenemos en la tierra se evaden en el momento que la aeronave se separa del asfalto. Es un modo de huida sin llegar a dejar olvidar lo que dejas atrás, es un hasta pronto, porque todo vuelve.
Miro el horizonte desde la ventanilla del avión siendo curioso y con ganas de saber que hay más allá de él, ¿Qué me podré encontrar? Lo que sí sé, es que en este momento me lleva a un nuevo país, gente y cultura, donde el aventurero que hay dentro de mí, no dejará pasar desapercibido y absorberá todo para recordar dentro de un tiempo a través de las fotos que realice.
He de reconocer que me gusta viajar junto a la persona que es lo más importante para mí. Cada vez que está a mi lado dentro de este medio de transporte, me siento más seguro aún. De nada me sirve mirar por la ventanilla y buscar el horizonte sino voy a descubrir lo que haya más allá junto a mi pareja. Con esto no quiero decir que me dé miedo volar solo, para nada, ya que en varias ocasiones por placer, trabajo u familiar he tenido que hacerlo. Pero para mí, prefiero viajar acompañado.
En este vuelo además me acompañan dos amigos. Hay momentos en la vida que también me gusta viajar con ellos y compartir mis experiencias y viajes con ellos en primera persona.
Es otro modo de viajar, por supuesto y que muchos debaten, pero ¿por qué no tener anécdotas viajeras junto con amigos? Esto hace que dentro de meses y años en cualquier comida o cena haga que te rías y recuerdes lo bien que lo pasamos, el que tuvo un percance, el que...
De nuevo vuelvo a mirar por la ventanilla y veo el ala del avión y me lleva a preguntarme ¿esto es seguro? Solo son hierros, pintura y asientos junto a dos motores a cinco mil metros de altura. Pues me da seguridad y más que un coche. Accidentes de coche hay a diario, ¿Ninguna vez has subido al metro y falló el motor? O ¿el autobús se quedó sin aire acondicionado?.
A todo esto has respondido que sí, entonces, ¿por qué le exigimos tanto al subir a un avión? Es un medio de transporte igual que cualquier otro, con la diferencia que va por el aire, pero del mismo modo hay barcos que se han hundido. Sigo pensando que es el medio de transporte más seguro. Pero ojo, que también tuve sustos en él, desde despegues raros, aterrizajes dando botes, maletas rotas, problemas en mostradores... Pero del mismo modo ¿quién no se ha llevado un susto en su coche?
Me asomo por la ventana y París está a mis pies y solo ver el mapa de la ciudad me trae una sonrisa. Recuerdos de un anterior viaje y momentos únicos vividos allí. Y es en este momento donde vuelvo a pensar ¿Por qué necesito volar? ¿por qué necesito viajar?
La respuesta es fácil y sencilla: es mi modo de vida, así es como quiero vivirla. Quiero vivirla viajando, siendo un curioso y acercando a todos aquellos que quieran vivirla conmigo, a través de las redes sociales, donde muchos me encontráis, esa curiosidad que tanto me inquieta. Ya sea en coche, andando, en bus, tren... Sea el medio que sea, transmitir esa curiosidad que me hace diferente a los demás. Pero por ahora me quedo con el avión como medio de transporte para contar mis batallas.
Comentarios:
29/10/2014 21:15
Roireto
Te voy a confesar que el momento que más me gusta es cuando dan potencia a tope a los motores y se acelera por la pista de despegue. =D ... me encanta!!!
13/10/2014 19:15
Felipe
Espero estar de viaje contigo pronto, mientras me conformo con tus postales. Abrazos de esta familia q te quiere.
13/10/2014 12:28
Arturo
Me gusta mucho este articulo... volar es viajar, es conocer otros lugares, otras personas, otras cultiras, es abrirse la mente y el corazón y dejarse sorprender.... yo creo que por eso necesito volar, viajar, para sentir que estoy vivo.