Bolonia: Viajando a la Edad Media

04/12/2015

Cuando viajamos por el mundo siempre hay dos cosas fundamentales que debemos de pensar antes de comenzar nuestra aventura. La primera, es cómo llegar a nuestro destino: en coche, en tren o en avión y la segunda, es en qué lugar nos tenemos que quedar para disfrutar del sitio que vamos a visitar.

Teníamos varios días de vacaciones, que juntamos con el fin de semana, y elegimos uno de los destinos que más ganas teníamos de volver: Italia. En concreto elegimos un sitio muy especial: la ciudad de Bolonia.

Caminar por el centro histórico de Bolonia es transportarse a la Edad Media ya que sus edificios y la distribución de sus calles apenas han variado desde esta lejana época. Es una de las ciudades con más vida universitaria de todo el mundo pero sobre todo destaca por su deliciosa comida.

Desde hace algún tiempo, cada vez nos parecen más impersonales los hoteles y nuestras necesidades cada vez se ven menos cubiertas en estos lugares. Una de las cosas que cada vez nos gusta más, es no tener que estar pendiente ni limitado por horarios, como por ejemplo a qué hora desayunar o a qué hora comer. Ya sabemos que los horarios son impuestos por los hoteles. A nosotros cada vez nos gusta más hacer los viajes de una manera más libre y sin tener que preocuparnos de las reglas de cada hotel.

Nos gusta viajar y sentirnos como si estuviéramos en nuestra propia casa aunque estemos en una ciudad o en un país al que acabamos de llegar. Por esta razón elegimos el comparador hundredrooms donde encontramos apartamentos bastante baratos. En esta página pudimos elegir un alojamiento entre un montón de opciones y así poder vivir la ciudad italiana de una manera más libre y sin ataduras ya que en cualquier momento hacíamos lo que queríamos . Gracias a que alquilamos este apartamento en algunas ocasiones ahorramos bastante dinero ya que muchos días desayunábamos o cenábamos en el mismo, lo que previamente habíamos comprado, sin prisas y a la hora que queríamos.

Lo primero que hicimos en cuanto llegamos a Bolonia fue descubrir sus siete famosos secretos. Para que os hagáis una idea nos lo tomamos como una ginkana por toda la ciudad y fue de lo más divertido. Los siete secretos son:

El sol por un agujero

En la Basílica de San Petronio se encuentra uno de los mayores meridianos del mundo. Hay una época que va desde marzo hasta noviembre en la que el sol, cuando se encuentra en lo alto del cielo (más o menos sobre las doce), se cuela por un agujero del techo y marca una línea de luz que nos indica la fecha exacta en la que estamos.

La cara de Satanás

Según una antigua leyenda en la Piazza Santo Stefano vivía una familia muy poderosa. Entre ellos había muchísimos conflictos y sus relaciones no eran de lo más ideales.

El padre encargó que todas las caras de la familia fueran esculpidas en la fachada de este lujoso edificio. El escultor traicionó a la familia y entre todas sus caras talló la cara del diablo. No se sabe el por qué. Hay dos opciones: la primera podría ser para indicar que el mal habitaba en esta casa o que algún miembro de la familia era la maldad personificada.

Cannabis de la Edad Media

En la Via de la Independenza concretamente en la Casa Stagni podremos leer en una pintura esta curiosa frase “Panis vita, Canabis protectio, vnum laetitia” en castellano significa “el pan es vida, el cannabis es protección, el vino es alegría”. Antiguamente en Bolonia se cultivaba esta planta y era origen de muchas de las riquezas de esta ciudad. En la casa donde está esta inscripción antiguamente era uno de los lugares donde se vendía droga a todo el mundo de una forma legal.

El arco de los susurros

En la Piazza de la Maggiore, justamente en los pórticos del Palazzo del Podestá, hay un sistema de comunicación de lo más curioso. Justamente debajo de la Torre dell'Arengo están las estatuas de San Doménico y de San Petronio. Si os colocáis debajo de uno de estos dos santos y habláis, el techo abovedado hará de hilo conductor y llevará vuestra voz hasta la esquina opuesta. Esto servía para que los curas de la Edad Medía pudieran confesar a los leprosos sin miedo al contagio.

Los atributos de Neptuno

La fuente más conocida, y para nosotros la más bella de todas de la ciudad, es la fuente de Neptuno. Lo curioso de esta fuente es que el dios del mar no siempre fue así, ya que tuvo que ser reformada porque a la Iglesia le parecía ciertas partes de su cuerpo escandalosas. En concreto lo que les escandalizaba era el tamaño de los atributos de este famoso dios mitológico. El escultor que lo realizó tuvo que “minimizarlo” pero se guardó un as en la manga. Una de las baldosas cerca de la entrada a la Salaborsa tiene un color diferente a las otras. Si te sitúas encima de ella, debido a un efecto óptico, el dedo gordo de la mano del dios marítimo parece el miembro viril en pleno crecimiento.

Las tres flechas

En la Strada Maggiore muy cerca del pasaje de Corte Isolani, hay un inmueble con unas grandes vigas de madera. Si os fijáis, podréis ver tres flechas clavadas. Cuenta una curiosa leyenda que varios malhechores querían matar a un rico comerciante. Cuando los tres fueron a disparar una dama desnuda apareció por otra venta con lo que se despistaron y las flechas no llegaron a su definitivo destino y se clavaron en la madera. Se cuenta que son las originales pero hay que tener paciencia para encontrarlas.

La Finestrella

La ciudad de Bolonia está atravesada por cientos de canales de agua subterráneos. Esto hace que el clima sea bastante extremo ya que en verano es bastante húmedo y en invierno hace un frío increíble. Durante muchos años Bolonia fue conocida como la pequeña Italia por todos estos pequeños ríos subterráneos. Muchos de estos canales desaparecieron y otros quedaron por debajo de las edificaciones modernas. Hay uno de ellos que está a la vista y la sensación que tienes al verlo es que estas en Venecia. Es conocido como la Finestrella y pertenece al Canalle delle Molline y lo podréis encontrar en la calle Via Piella exactamente en el número 18.

Bolonia es una de las mejores ciudades que hemos visitado nunca y donde más nos hemos divertido buscando todos sus secretos. Además de todo esto es uno de los mejores lugares para comer.

Os recomendamos la Osteria Dell´Orsa, recomendación de los chicos de Salta Conmigo. Un restaurante de comida casera con precios económicos y un ambiente juvenil. Para nosotros fue el lugar donde mejores tortellinis hemos comido en la vida. Tanto nos gustó que repetimos en cuatro ocasiones y en ninguna de ellas nos defraudó.